Pues no, no conocía MyPaint; un destino esquivo o quizás que la versión 1.0 no salió hasta hace muy poquito han conseguido mantener mi ignorancia sobre este excelente software que convierte tu monitor en un caballete digital, útil y sencillo.

Y es que éstas son precisamente sus características principales. Arranca rápido, es ligero, con una barra de herramientas simple y con diferentes paneles y opciones directamente accesibles mediante atajos de teclado que desaparecen en el momento que han realizado su función; o que pueden fijarse a un lateral de la ventana de trabajo si el usuario lo estima conveniente. Objetivo, que su interfaz no obstaculice su principal misión, ser una herramienta para pintar digitalmente.

Entre las características principales de la aplicación destacan:

• Ser multiplataforma, con versiones disponibles para Linux, Windows y Mac OS X.
• Proporciona sus mejores resultados con tabletas gráficas que admitan sensibilidad a la presión. Si dispones de una Cintiq verás que la interacción con el lienzo es total.
• Incluye multitud de opciones para crear y configurar pinceles, o mejor, brochas según la traducción de la aplicación.
• Permite trabajar con capas, aunque de forma básica, en sintonía con la filosofía del programa.

Por otro lado, me ha gustado la idea de trabajar sobre un lienzo sin límites, puedes empezar a dibujar y luego continuar en cualquier dirección. También incluye una especie de archivo de notas para salvaguardar aquellos aspectos que precisemos recordar o mantener como muestras de color, ajustes particulares, mezclas, o notas manuscritas si fuese necesario.

El formato con el que trabaja el programa se llama Open Raster y puede ser utilizado desde GIMP si se instala el plugin disponible para tratar archivos ora. Ni que decir tiene que el programa se puede descargar gratuitamente y se distribuye con licencia GPLv2.

¿Y qué nos queda?, pues ya sólo tener el talento para pintar así —pulsa sobre la imagen para disfrutar del proceso creativo–: