Quien se empeña en pegarle una pedrada a la luna no lo conseguirá, pero terminará sabiendo manejar la honda.
Sorprendernos por algo es el primer paso de la mente hacia el descubrimiento.
La diferencia entre la estupidez y la genialidad es que la genialidad tiene sus límites.
El genio convierte la excepción en regla.
Siempre sueña y apunta más alto de lo que sabes que puedes lograr.
