La verdadera ignorancia no es la ausencia de conocimiento, sino la negativa a adquirirlo.
No existe peor intolerancia que la de la razón.
Si un negocio te abruma por el principio, comiénzalo por el fin.
Si quieres un final feliz, depende de cuándo acabas la historia.
Sin haber conocido la miseria es imposible valorar el lujo.
