Puedes engañar a todo el mundo algún tiempo. Puedes engañar a algunos todo el tiempo. Pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo.
El deseo de ser hábil impide a veces serlo.
De nada sirve al hombre lamentarse de los tiempos en que vive. Lo único bueno que puede hacer es intentar mejorarlos.
En el campo de la observación, la oportunidad sólo favorece a la mente preparada.
